La Gran Misa Patólica representa un hito en la carrera teatral de Leo Bassi porque no es una obra de Teatro sino la adaptación al escenario de una verdadera “misa” bufonesca de la famosa Iglesia Patólica fundada por el Ilustre Payaso
Desde su inauguración el 28 de Diciembre del 2012 en Madrid, este lugar de culto llamado El Paticano de Lavapiés, dedicado a la adoración de un pato de goma amarillo “redentor”, celebra regularmente misas y acontecimientos como bodas y bautizos con su propia liturgia.
Lo más singular es que lo que empieza como una travesura original y divertida se ha convierte en algo que transciende la sátira, poniendo en evidencia las contradicciones siempre más grandes entre la narrativa oficial de nuestra sociedad y los valores que la gente vive.
Cada domingo en sus Misas Patólicas, el gran bufon que es Leo Bassi, provoca carcajadas y aplausos de consensos con preguntas y reflexiones tan básicas como:
Si la ciencia y la tecnologia es tan importante por la Marca España ¿Cómo es posible que su gobierno preste juramento sobre un libro donde las serpientes hablan? ¿ cómo puede cuando también en este libro se considera la sabiduría como fuente de todos nuestros pecados?
Mas allá del tema de la libertad de expresión, puesta tristemente en evidencia por la tragedia de Charlie Hebdo en París, la voluntad que tiene el público de reír de estas cosas demuestra un déficit de legitimidad de las instituciones religiosas. Y ahí está la originalidad de esta propuesta.
La Gran Misa Patólica no se limita sólo a ser un contenedor irónico para ordenar los argumentos laicos clásico. A raíz de sus propios enfrentamientos con los defensores intolerantes de la Religion, Bassi ha llegado a una conclusión fundamental: La Risa es sagrada y el Arte del Payaso tiene una función que conecta con la esencia del ser humano.
Quizás el Humor es lo que más caracteriza la Modernidad y a la vez lo que separa a la democracia del absolutismo. Es un acto de Amor a la libertad y un homenaje continuo al humanismo.
A pesar de la gran importancia que el humor y la comicidad tienen en nuestras vidas, la sociedad sigue considerándolo como una actividad frívola, lejos de las altas esferas de las aspiraciones religiosas. La fuerza de la obra de Bassi es situar el lenguaje irónico a un nivel de conciencia diferente, utilizando la poesía y la magia del Payaso como vehículo onírico que transforma el espectáculo en un acto cargado de ritual.
Así pues, la elección de un Dios tan improbable como el pato de goma de las bañeras, participa en este simbolismo. La ironía provocadora con la que un objeto tan humilde tiñe el trono del todopoderoso tiene su contrapartida profundamente moral:
¿No seria el mundo mejor si en lugar del Dios del Antiguo Testamento, vengador y castigador, el Cielo estuviese regentado por un Dios de broma, inocente, juguetón, optimista y amigo de los niños?
Un Dios revolucionario que se distingue de todos los demás por representar la imperfección y no la Perfección.
Así el Payaso ofrece al resto de la humanidad su propio Dios, este Dios de la Imperfección que se enfrente a la tiranía fanática de la perfección y de sus dos bastiones: la vanidad y el deseo de poder.
Sin lugar a duda es la más ambiciosa de las creaciones de Leo Bassi, que le sitúa en un terreno donde los verdaderos bufones siempre han buscado su razón de ser: Desafiar espiritualmente la lógica del mundo serio.
La Gran Misa Patólica destila todo el sabor de estas misas tan particulares oficiadas en el Paticano y es una introducción perfecta para los no iniciados a la Espiritualidad esperpéntica del Patolicismo.
Por último, dos precisiones más.
– Durante la Misa, se exhibirán al público 5 películas cortas , de 30 seg cada una del bisabuelo de Leo Bassi, Giorgio Bassi . Filmado hace 119 años por los legendarios hermanos Lumière. Son documentos excepcionales de los primeros Payasos de la historia inmortalizados sobre una película y es una primicia absoluta pues no consta que hayan sido exhibidas con anterioridad. Esto es posible gracias a unaautorización directa de la Fundación Lumière.
– El público puede participar en la celebración de la Misa Patólica reservando con anticipación, será un placer incluir en el desarrollo del oficio auténticos bautismos, bodas, y por qué no!… hasta divorcios patólicos.Leo Bassi
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